Agencias
¿Immobile como siempre? ¿Un renacido como Balotelli? ¿Novatos como Raspadori o Scamacca? Roberto Mancini tiene dos meses para encontrar a un goleador que permita a Italia superar la complicada repesca para ir al Mundial de Catar-2022.
Antes de enfrentarse a finales de marzo a Macedonia del Norte y después, en caso de victoria, a Portugal o Turquía, el seleccionador azzurro reúne hasta el viernes a 35 jugadores para una concentración, que supondrá la ocasión para Mancini de ver las diferentes opciones para el ataque, el punto débil de la vigente campeona de Europa, que no podrá contar hasta la próxima temporada con Federico Chiesa.
Ciro Immobile sigue siendo la opción número uno para ocupar el puesto de delantero centro, como ya lo fue en la pasada Eurocopa… pero su estatuto lo debe más a su rendimiento con la Lazio (17 goles en 19 partidos esta temporada) que por lo que ha demostrado con su selección (15 goles en 54 encuentros). No obstante, la Azzurra pagó cara su ausencia por lesión en los partidos decisivos de noviembre.
Immobile debe justificar de una vez su estatus en la selección, en la que es titular desde la Eurocopa tras haber estado compitiendo por ese puesto durante toda una temporada con Andrea Belotti, quien parece ahora descartado debido a sus repetidas lesiones.
El Sassuolo pone a disposición de Mancini un trío de atacantes en plena forma: Domenico Berardi (27 años, 23 partidos como internacional, 6 goles), que ya brilló en la Eurocopa, y los jóvenes Giacomo Raspadori (21 años, 7 partidos como internacional, 1 gol) y Gianluca Scamacca (23 años, 2 partidos como internacional).
Después de la última ventana internacional en noviembre, han brillado con los Neroverdi, marcando entre los tres 18 de los 22 goles de su equipo.
Berardi, al que le costó recuperar la forma después del torneo continental, debería ser quien ocupe el costado derecho que ha dejado huérfano Chiesa. Y Mancini podría decidir de alinearlo a sus dos compañeros de equipo para aprovecharse de los automatismos bien consolidados.
Después de casi un año y medio alejado de las canchas por dos graves lesiones de rodilla, el extremo de la Roma Nicolo Zaniolo volvió a jugar a mediados del pasado año y poco a poco recupera su nivel. José Mourinho utiliza sus cualidades tanto para atacar por la banda como para jugar como segundo delantero.
Con 8 partidos como internacional y dos goles, el delantero de 22 años solo ha jugado media hora desde septiembre, pero si no está lesionado debería ser un fijo en la convocatoria de Mancini, que le hizo debutar con 10 años en marzo de 2019.
Las expectativas también son grandes con Moise Kean, que ya no se puede considerar un debutante con la selección (12 partidos y 4 goles). No obstante, el actual delantero de la Juventus parece falto de confianza (solo 3 goles en 17 encuentros esta temporada) y ni siquiera ha sido llamado para este ‘stage’ por Mancini, que no parece contar con él.
El regreso de Mario Balotelli, a sus 31 años (14 goles en 36 selecciones), ha sido la gran sorpresa de la lista de convocados para la concentración de tres días en las instalaciones del centro nacional de Coverciano.
Hace más de tres años que ‘SuperMario’ no se viste con la Azzurra y parecía perdido para la causa tras media temporada pasada en el Monza (en Serie B) y su marcha hace unos meses al Adana Demirspor turco.
“La técnica no se olvida, es como los puñetazos para un boxeador. Mario dispara como pocos, en diciembre marcó desde 30 metros”, declaró a La Gazzetta dello Sport su entrenador en Turquía, el italiano Vincenzo Montella.
Con la llamada a Balotteli, Mancini demuestra además que las puertas de la selección están abiertas para todos, incluidos para aquellos jugadores que nunca hubiesen imaginado llegar a vestir la histórica camiseta azul, como el delantero centro del Cagliari Joao Pedro, nacido en Brasil hace 29 años y nacionalizado según las reglas de la FIFA, y que ahora tendrá tres días para convencer al seleccionador.
El miércoles, Mancini habló en una conferencia de prensa sobre Balotelli.
“¿Qué le he prometido? Absolutamente nada… Ha sido convocado como otros. Tenemos curiosidad por volver a verle después de un tiempo. No tiene que prometerme nada, como yo tampoco tengo que prometerle nada”, afirmó.