La UEFA impuso una multa de 30.000 euros al Atlético de Madrid tras los incidentes ocurridos durante la derrota frente al Arsenal en Londres el pasado octubre, en partido de la Liga de Campeones. El organismo europeo también dejó abierta una sanción adicional que podría impedir que los aficionados rojiblancos viajen a un encuentro continental, aunque esta medida quedó por ahora en suspenso.
Según informó la UEFA, varios seguidores del Atlético incurrieron en comportamientos de carácter racista en las gradas del Emirates Stadium, incluidos gestos imitando a un mono y saludos nazis. Además, se registró el lanzamiento de objetos hacia el terreno de juego, lo que agravó el expediente disciplinario.
Estas acciones violan el artículo 14(2) del Reglamento Disciplinario de la UEFA, motivo por el cual se aplicó una sanción severa. No obstante, el Comité de Control, Ética y Disciplina decidió suspender la prohibición de venta de entradas para un partido como visitante durante un periodo de prueba de un año. Si durante ese tiempo no se repiten incidentes similares, la penalización no se ejecutará.