Portugal se coronó campeón del Mundial Sub-17 por primera vez en su historia tras vencer 1-0 a Austria en la final disputada en Doha, Catar. El tanto decisivo llegó al minuto 32, cuando Anísio Cabral, delantero de las divisiones formativas del Benfica, empujó el balón al fondo de la red en el estadio Al Khalifa.
En la recta final del encuentro, la selección lusa mantuvo con firmeza la ventaja hasta que, al minuto 95, el árbitro peruano Roberto Pérez señaló el final del partido, desatando la celebración del plantel dirigido por Bino Maçaes. Entre los asistentes en los palcos se encontraba el presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
Cristiano Ronaldo, referente absoluto del fútbol portugués, también celebró la gesta histórica. El delantero del Al Nassr felicitó a los campeones a través de una publicación en Instagram: “Gigantes. Felicidades, Campeones del Mundo”, escribió acompañando una imagen del equipo juvenil.
El camino de Portugal hacia el título comenzó con contundencia: goleó 6-1 a Nueva Caledonia, arrasó 6-0 a Marruecos y aseguró su clasificación pese a caer 2-1 ante Japón en la última jornada de la fase de grupos.