El Milan firmó este domingo una victoria contundente ante el Hellas Verona (3-0) en San Siro y lanzó un aviso directo a sus rivales en la pelea por el título. El conjunto ‘rossonero’, que ya solo compite en la Serie A, se colocó virtualmente como líder del campeonato y quedó a la espera de un tropiezo del Inter para cerrar la jornada en lo más alto de la tabla.
Golpeado aún por la reciente eliminación en la Supercopa de Italia —su segunda caída de la temporada tras la Copa—, el Milan respondió con autoridad y fútbol en un partido que se resolvió en apenas siete minutos. El triunfo confirmó el gran momento del equipo, invicto desde hace cuatro meses y derrotado únicamente en la primera jornada por el Cremonese, recién ascendido.
Liberado del calendario europeo y copero, el Milan ha puesto todos sus esfuerzos en el ‘Scudetto’, el gran objetivo tras una campaña anterior decepcionante. Esa ambición quedó reflejada incluso en los minutos finales, cuando Massimiliano Allegri mostró su enfado pese al marcador favorable, exigiendo máxima concentración hasta el último instante.
El Verona apenas ofreció resistencia. El encuentro se rompió en el tiempo añadido del primer acto y quedó sentenciado tras el descanso. Pulisic y Nkunku, sin la presencia de Leao y a la espera de refuerzos en el mercado invernal, se erigieron como las principales referencias ofensivas. Ambos demostraron una efectividad que encaja a la perfección en el libreto de Allegri. Santiago Giménez, por su parte, no logró aprovechar sus oportunidades y ha perdido protagonismo.
Christian Pulisic volvió a aparecer cuando el equipo más lo necesitaba. El estadounidense, ya un fijo en el once y en el marcador, firmó su octavo gol en la Serie A y el décimo de la temporada. Atento en el segundo palo, aprovechó una jugada a balón parado ejecutada por Modric y prolongada por Rabiot para abrir el marcador en el último suspiro del primer tiempo.
Ese gol desmoronó al Verona. Apenas iniciado el complemento, Nkunku amplió la ventaja desde el punto penal tras una sujeción innecesaria de Nelsson. Cinco minutos más tarde, el francés selló su doblete tras cazar un balón suelto en el área luego de un disparo de Modric que Montipò no logró despejar con seguridad.
Con el triunfo, el Milan se sitúa de forma provisional en la cima de la Serie A, con un partido más que el Inter y dos más que el Nápoles. Una posición que, más allá de lo matemático, incrementa la presión sobre sus perseguidores y refuerza la candidatura ‘rossonera’ al título.