
La estrategia del París Saint-Germain para impulsar la candidatura de Ousmane Dembélé al Balón de Oro se tambalea tras las declaraciones de Achraf Hakimi, quien manifestó públicamente su deseo de ganar el galardón y aseguró que su condición de defensor le otorga méritos adicionales.
“He completado una temporada histórica. No hay muchos jugadores que hayan marcado en cuartos, semifinales y final. Y como defensor es más difícil (…) Creo que un defensa lo merece más que un delantero”, declaró el exjugador del Real Madrid en una entrevista emitida por Canal+.
Las palabras de Hakimi rompen con la línea marcada por el club parisino, que había diseñado una campaña de comunicación centrada exclusivamente en Dembélé para evitar la dispersión de votos entre sus campeones de Europa, un riesgo que ya pasó factura a la selección española en 2010, cuando Lionel Messi superó a Andrés Iniesta y Xavi Hernández.
El PSG veía en Dembélé su carta más fuerte para conseguir el segundo Balón de Oro de su historia, tras el de Messi en 2021, y capitalizar así una temporada histórica en la que conquistaron su primera Liga de Campeones. El presidente Nasser Al-Khelaïfi fue tajante: “Si Ousmane Dembélé no gana el Balón de Oro, es que hay un problema”. Otros referentes del vestuario, como Vitinha, se habían sumado al respaldo público: “Es el jugador que nos ha llevado al título”.
En las semanas posteriores a la final de Múnich ante el Inter de Milán, Dembélé acaparó todos los focos: paseó el trofeo por programas de televisión, lo llevó a Roland Garros y recibió ovaciones en el Parque de los Príncipes. Todo parecía encaminarse a una promoción cerrada en torno a su figura… hasta la irrupción de Hakimi.
El defensa marroquí reivindicó su aporte con cifras poco habituales para su posición: 11 goles y 16 asistencias. “La gente cree que soy mediocampista o delantero, pero no: formo parte de la línea de cuatro y tengo que defender. Cuando un defensor hace eso, merece el premio más que un atacante”, sentenció.
Según L’Équipe, el PSG intentó frenar la difusión de estas declaraciones grabadas días antes de su emisión, aunque el jugador se negó. El club, por su parte, niega cualquier intento de censura.