
Los Oklahoma City Thunder dieron un paso clave hacia sus primeras Finales NBA desde 2012 al vencer por 128-126 a los Minnesota Timberwolves en el cuarto partido de las finales de la Conferencia Oeste, tomando ventaja 3-1 en la serie.
El equipo de Oklahoma City tendrá su primera oportunidad para cerrar la serie este miércoles en casa. Incluso en caso de perder los próximos dos encuentros —el segundo en casa y el siguiente en Minnesota—, contarían con una última opción en un hipotético séptimo partido, de nuevo en Oklahoma.
Los Thunder llegan con ventaja y confianza, pues Minnesota nunca ha remontado una desventaja de 1-3 en una serie de playoffs en sus cuatro intentos previos.
El MVP Shai Gilgeous-Alexander fue la gran figura del partido, con su mejor actuación en playoffs: 40 puntos (13 de 30 en tiros), 9 rebotes y 10 asistencias. Además, anotó 12 de 14 tiros libres, cruciales en los minutos finales para asegurar la victoria. Jalen Williams aportó 34 puntos, 3 rebotes, 5 asistencias y 3 robos, con seis triples. Chet Holmgren sumó 21 puntos, 7 rebotes y 3 tapones, incluyendo una destacada jugada defensiva al final contra Jaden McDaniels.
Por su parte, la defensa de OKC logró contener a Anthony Edwards, limitado a 16 puntos (5 de 13 en tiros y 1 de 7 en triples), y a Julius Randle, que apenas aportó 5 puntos (1 de 7 en tiros y 0 de 3 desde el arco). Jaden McDaniels fue el mejor anotador de Minnesota con 22 puntos, mientras que el banquillo de los Timberwolves produjo 64 puntos, frente a 27 del de los Thunder. Sin embargo, cada intento de remontada local fue respondido eficazmente por Oklahoma City.