
El mítico estadio de Wembley será escenario este sábado (15h30 GMT) de una final inédita de la Copa de Inglaterra entre dos clubes con trayectorias muy distintas: el modesto Crystal Palace, que aún no ha conquistado títulos oficiales, y el Manchester City, un gigante moderno que busca cerrar una temporada decepcionante con un trofeo.
Pese a su condición de favorito, el equipo dirigido por Pep Guardiola llega con dudas tras una campaña marcada por lesiones clave, la pérdida del título en la Premier League y una eliminación temprana en la Liga de Campeones.
“Es una buena costumbre llegar a Wembley y siempre es importante ganar trofeos. Tenemos la final de la Copa de Inglaterra como objetivo y, en una temporada espantosa, hemos conseguido hacerlo”, declaró el delantero noruego Erling Haaland a la BBC.
Para el City, esta será su tercera final consecutiva de la FA Cup, tras el título en 2023 y la derrota en 2024. El Crystal Palace, en cambio, busca escribir historia con su primer gran título, tras una campaña sorprendente que lo ha llevado hasta la gran cita de Wembley.