Con la confirmación de Carlo Ancelotti como próximo seleccionador de Brasil a partir del 26 de mayo, el Real Madrid ya tiene listo a su sucesor: Xabi Alonso. El técnico español, que acaba de cerrar una etapa histórica al frente del Bayer Leverkusen, volverá a Valdebebas a partir de junio para asumir el mando del banquillo merengue.

Alonso se despidió el domingo de la afición del Leverkusen en un emotivo homenaje durante su último partido en casa. El estadio vibró con pancartas, cánticos y agradecimientos para el entrenador que transformó al club alemán en apenas dos temporadas. Asumió el cargo en octubre de 2022 con el equipo al borde del descenso, y no solo logró clasificarlo a competiciones europeas, sino que en la temporada siguiente conquistó la Bundesliga y la Copa de Alemania, además de llegar a la final de la Liga Europa. En esta campaña, que finaliza este fin de semana, sumó la Supercopa de Alemania y peleó el título liguero con el Bayern Múnich.

Su brillante recorrido en Alemania le abre las puertas del Real Madrid, donde ya dejó huella como jugador entre 2009 y 2014, y como entrenador del Infantil A en la temporada 2018-2019. También dirigió al filial de la Real Sociedad, al que ascendió a Segunda División antes de dar el salto al fútbol alemán.

La figura de Xabi Alonso siempre ha sido bien valorada en el club blanco. Su carácter, liderazgo e ideas claras lo convirtieron en una apuesta natural para el futuro del banquillo. Aunque en su momento optó por crecer fuera del club, el Madrid nunca dejó de seguirle de cerca.

Ahora, regresa en plena madurez como entrenador, con una identidad de juego definida: un estilo ofensivo y estructurado en una línea de tres centrales con carrileros largos. Su primer gran reto será liderar al equipo en el nuevo Mundial de Clubes, una competición que el club considera estratégica tanto en lo deportivo como en lo económico, con una posible ganancia superior a los 120 millones de euros.