El técnico del Tottenham, Ange Postecoglou, considera que ganar la Europa League podría ser un punto de inflexión para el club, no solo por el título en sí, sino por el cambio de percepción que implicaría dentro y fuera de la institución.

Con una sequía de 17 años sin trofeos, el entrenador australiano cree que una victoria sobre el Manchester United en la final del 21 de mayo en Bilbao sería clave para romper con la imagen de un equipo que “siempre se derrite en los grandes escenarios”.

“Si miramos la historia reciente del club, creo que este triunfo podría marcar un antes y un después en cómo se percibe al Tottenham y cómo se perciben los propios jugadores”, dijo Postecoglou durante el día de medios del club. “Hasta que no lo logres, no importa cuánto avances. La gente siempre dirá que no has ganado nada. Y en el fútbol, como en la vida, eso importa”, añadió.

Tottenham no levanta un trofeo desde la Copa de la Liga en 2008 y su último título europeo fue la Copa de la UEFA en 1984. Las vitrinas del club reflejan su época dorada bajo el mando de Bill Nicholson entre 1958 y 1974, con títulos como la liga inglesa (1961), tres Copas FA, dos Copas de la Liga, la Recopa de Europa y la Copa de la UEFA.

“Camino por el estadio y veo muchas fotos en blanco y negro”, reflexionó el entrenador, evidenciando la necesidad de escribir una nueva historia con imágenes en color.