El Athletic de Bilbao sufrió un duro golpe en su lucha por la Europa League al caer 3-0 ante el Manchester United este jueves en San Mamés, en el duelo de ida de las semifinales. La derrota deja al conjunto vasco con la necesidad de una remontada histórica en Old Trafford si quiere llegar a la final, que se jugará precisamente en su estadio.

Casemiro abrió el marcador al minuto 30 tras una jugada iniciada por un centro de Harry Maguire, peinada por Manuel Ugarte. Poco después, el partido dio un giro definitivo: Dani Vivian fue expulsado en el 35 tras revisión del VAR, y Bruno Fernandes convirtió el penalti para el 2-0.

El propio Fernandes volvió a marcar en el minuto 45, esta vez tras un gran pase de tacón de Ugarte, dejando el 3-0 antes del descanso y prácticamente encarrilando la eliminatoria.

En la segunda mitad, el United mantuvo el control del juego y estuvo cerca de aumentar la ventaja. Le anularon un gol a Alejandro Garnacho en los primeros minutos, y luego estrellaron dos remates en los palos: uno de Mazraoui al final del primer tiempo y otro de Casemiro ya avanzada la segunda parte.

“Está claro que el resultado es muy malo, pero la vuelta hay que jugarla. No vamos a dar nada por perdido”, aseguró el técnico Ernesto Valverde tras el encuentro.

El Athletic ve complicarse así el sueño de levantar su primer título europeo en casa, ya que la final está programada para el 21 de mayo en San Mamés, el mismo escenario en el que este jueves vivieron una noche amarga.