El tenista griego Stefanos Tsitsipas ha decidido dar un giro en su carrera tras un discreto 2025 que lo hizo caer hasta el puesto 34 del ránking ATP. El exnúmero tres del mundo anunció un cambio significativo: dejará la raqueta Wilson que lo acompañó durante toda su trayectoria profesional para jugar a partir de ahora con una Babolat.

La decisión marca el inicio de una nueva etapa para el ateniense de 27 años, quien ya había probado de manera experimental este cambio a comienzos de 2025. En aquella ocasión utilizó una Babolat con resultados positivos, al conquistar el título de Dubái, el único trofeo que levantó en la temporada y el duodécimo de su carrera, de acuerdo con el portal especializado tennis24.gr.

Sin embargo, tras ese torneo Tsitsipas regresó a la Wilson Blade 98, con la que afrontó el resto de una campaña marcada por más frustraciones que alegrías. El griego cerró prematuramente su temporada en septiembre, luego de ser eliminado en la segunda ronda del Abierto de Australia y de quedar fuera en la fase de grupos de la Copa Davis ante Brasil.

Desde los cuartos de final alcanzados en Barcelona y Montecarlo, ambos sobre arcilla en abril, el rendimiento de Tsitsipas fue en declive. No logró encadenar más de dos victorias consecutivas en los torneos posteriores y, recientemente, incluso optó por retirarse del Masters 1000 de Shanghái.

Dos veces finalista de Grand Slam —Roland Garros 2021 y Abierto de Australia 2023— y campeón de las Finales ATP en 2019, Tsitsipas ha sufrido una caída sostenida en las últimas dos temporadas. En busca de una reacción, en los últimos días probó distintos modelos de raqueta en el Club Tatoi de Atenas, hasta inclinarse por la Babolat Pure Aero 98, la misma que utilizó en su último título. Se trata de una herramienta que le ofrece mayor potencia, aunque con menor control.

La nueva etapa del griego comenzará a principios de enero, cuando represente a Grecia en la United Cup, antes de afrontar una nueva edición del Abierto de Australia, el primer Grand Slam de la temporada.