El ala-pívot Norchad Omier fue elegido este lunes por aclamación como Atleta Profesional del Año 2025 en Nicaragua, distinción otorgada por la Asociación de Cronistas Deportivos de Nicaragua (ACDN), tras un año destacado tanto a nivel internacional como en el baloncesto profesional de Estados Unidos.

Omier, principal referente de la selección nicaragüense, brilló en la AmeriCup y en la primera ventana de las eliminatorias rumbo a la Copa del Mundo de Baloncesto FIBA 2027. Su rendimiento le permitió dar el salto al profesionalismo al firmar contrato con los Cleveland Charge, filial de los Cleveland Cavaliers en la NBA G-League, donde registra promedios de 14 puntos, 11,5 rebotes por partido y ocho doble-doble en la temporada.

El nicaragüense también fue invitado al campo de entrenamiento de los Cleveland Cavaliers, con los que disputó un partido de pretemporada en el que sumó 6 puntos y 4 rebotes en apenas 7 minutos de acción, consolidando su proyección dentro de la organización.

Tras culminar su etapa en la NCAA y quedar fuera del último Draft de la NBA, Omier continuó demostrando su valía en la NBA Summer League de Las Vegas, donde promedió 9,2 puntos y 8,4 rebotes con el equipo de Cleveland.

Con la selección nacional, su impacto fue decisivo. El pasado 28 de noviembre, en Managua, durante el debut de Nicaragua en la primera ventana clasificatoria al Mundial FIBA 2027, Omier firmó una actuación sobresaliente ante Estados Unidos con 26 puntos, 13 rebotes —seis ofensivos—, seis asistencias, dos robos y un tapón, pese a la derrota 67-102.

En el partido de vuelta, disputado en territorio estadounidense, Nicaragua volvió a caer por 123-93, pero Omier cerró el encuentro con un impresionante doble-doble de 20 puntos y 20 rebotes.

En la AmeriCup, el ala-pívot fue uno de los jugadores más dominantes del torneo al promediar 22,3 puntos por partido, la segunda mejor cifra del certamen, además de 18,3 rebotes y seis asistencias por encuentro. Su actuación más destacada llegó ante Colombia, con 30 puntos y 20 rebotes, confirmando su estatus como la gran figura del baloncesto nicaragüense.