El séptimo y decisivo partido de la Serie Mundial entre los Blue Jays de Toronto y los Dodgers de Los Ángeles, disputado el sábado, se convirtió en un fenómeno televisivo en Canadá: registró una audiencia media de casi 11 millones de espectadores, la más alta para una emisión en el país desde los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver 2010.
Según informó Rogers Communications, encargada de la retransmisión, cerca del 45 % de la población canadiense —unos 18,5 millones de personas— sintonizó el encuentro al menos por algunos minutos. El pico máximo se alcanzó en la novena entrada, cuando 14 millones de espectadores siguieron con tensión el turno al bate de Ernie Clement, quien intentaba romper el 4-4 que marcaba el marcador en ese momento.
Finalmente, los Dodgers se quedaron con el campeonato al anotar una carrera en la undécima entrada y sellar el 5-4 definitivo, mientras que los Jays no lograron igualar en su último intento en el plato.
En total, los siete partidos de la Serie Mundial promediaron 7,5 millones de espectadores en Canadá, y 23 millones de personas vieron al menos parte de la contienda por el título.
Rogers Communications detalló los promedios de audiencia por juego: 7 millones en el primero; 6,6 millones en el segundo; 5,8 millones en el tercero; 6,2 millones en el cuarto; 7,2 millones en el quinto; 9,4 millones en el sexto; y 10,9 millones en el séptimo, el más visto por amplio margen.