
En una de las presentaciones más humillantes en la historia del LA Galaxy, el equipo angelino fue aplastado 7-0 por los Red Bulls de Nueva York este sábado en el Sports Illustrated Stadium, ante 23,225 espectadores.
La goleada fue liderada por Eric Maxim Choupo-Moting, quien marcó al minuto 7 y 31. Emil Forsberg también brilló con un doblete al 16 y 50, mientras que Cameron Harper (68′), Dennis Gjengaar (88′) y un autogol de Mike Yamane en tiempo de compensación (93′) completaron la histórica victoria para el conjunto neoyorquino, subcampeón de la última temporada.
El resultado no solo significó la peor derrota del Galaxy en cuanto a diferencia de goles en su historia, sino también el mayor triunfo en ese mismo aspecto para los Red Bulls.
“En todos los partidos anteriores habíamos competido. En su mayoría, las derrotas fueron por un solo gol. No lo estoy justificando, pero esta noche se nos fue completamente de las manos. Es algo que debemos corregir, y rápido”, reconoció el técnico del Galaxy, Greg Vanney.
El equipo californiano hizo historia negativa al convertirse en el primer club de la MLS que inicia una temporada con 12 partidos sin ganar, acumulando nueve derrotas y tres empates.
El delantero Christian Ramírez ofreció disculpas a la afición angelina que viajó hasta Nueva York: “Quiero pedir perdón a los hinchas que se desplazaron. Sabemos lo que significa gastar su dinero para venir a apoyarnos, y no estuvimos a la altura”.
El partido reeditó la final de la MLS disputada hace seis meses, en la que el Galaxy se coronó campeón. Seis de los jugadores de los Red Bulls que estuvieron en aquella final también participaron en el encuentro del sábado.