Por decimoquinta vez en su historia, el Giro de Italia arrancará fuera de territorio italiano. Este viernes, Albania será el punto de partida de la edición 108, con una etapa inicial corta pero explosiva entre Durrës y Tirana, ideal para los corredores más versátiles del pelotón.

Sin prólogo, los 184 ciclistas se enfrentarán a un recorrido de 164 kilómetros con dos retos montañosos destacados: el ascenso a Gracen (13,5 km al 5,2%) y una doble subida a Surrel (4,9 km al 5,4%). Un terreno perfecto para especialistas como Wout Van Aert, Tom Pidcock o Mads Pedersen, quienes sueñan con vestir la primera maglia rosa y conservarla hasta la contrarreloj individual del sábado.

Van Aert, que ya ha liderado en el Tour de Francia y en la Vuelta a España, confesó su ilusión por completar la trilogía: “Sería un sueño tener también el maillot rosa en el Giro”. Sin embargo, el belga llega con dudas sobre su estado físico, tras sufrir una infección viral en la Amstel Gold Race del pasado 20 de abril.

Por su parte, Tom Pidcock afronta su primer Giro al mando del joven equipo suizo Q36.5, y lo hace con grandes aspiraciones: “Llego con mucha ambición”, afirmó el británico.

Incluso favoritos al título como Primoz Roglic o Juan Ayuso podrían intentar sorprender desde esta primera jornada. “Estoy bien, estoy feliz y preparado para revivir las emociones de 2023”, declaró Roglic, uno de los cinco ganadores del Giro presentes en esta edición, junto a Nairo Quintana (2014), Egan Bernal (2021), Richard Carapaz (2019) y Jai Hindley (2022).