
Nikola Jokic cumplió 30 años el miércoles y sus compañeros de los Nuggets de Denver lo celebraron con una desafinada versión de “Feliz Cumpleaños”. Sin embargo, el tres veces MVP de la NBA no es precisamente fan de las fiestas de cumpleaños.
“No me gusta envejecer”, confesó Jokic, aunque, en cuanto a su juego, bromeó: “Como el vino, mejoro con el tiempo”.
Y los números lo respaldan. Con promedios de 29.8 puntos, 12.6 rebotes y 10.2 asistencias por partido, Jokic está en medio de una de sus mejores temporadas. Además, con 25 triples-dobles acumulados, está a solo cuatro de romper su propio récord de franquicia.
Su entrenador, Michael Malone, se maravilla con su constante evolución. “No sé cuál es su límite. Sigue extendiendo los límites de la grandeza”, expresó.
Desde su llegada a Denver a los 20 años, Jokic se ha transformado en una superestrella que llevó a los Nuggets a su primer título en 2023. Ahora, en su vida personal, es padre de dos hijos y su patrocinador, 361 Degrees, se prepara para lanzar un modelo de zapatos inspirado en Peppa Pig, un guiño a su espíritu infantil.
Esta temporada, Jokic ha añadido un nuevo elemento a su juego: el tiro de larga distancia. Con un 45% de aciertos en triples, la mejor marca de su carrera, sigue demostrando que su evolución no tiene techo.