
Un penalti señalado por el VAR en los últimos instantes permitió al Mónaco rescatar un empate (2-2) frente al Manchester City en el Estadio Luis II, en un partido donde los de Pep Guardiola dominaron con claridad pero no supieron sentenciar, dejando escapar dos puntos en la Champions.
El equipo inglés, sostenido en la pegada de Erling Haaland, volvió a tropezar en un escenario que ya le fue adverso en 2017, cuando cayó en octavos ante un Mónaco liderado por Mbappé y Falcao. Esta vez, frente a un rival mermado por hasta ocho bajas y bajo la presión sobre su técnico Adi Hütter, los ‘citizens’ no lograron transformar su superioridad en un triunfo.
Haaland abrió el marcador al cuarto de hora con un toque sutil tras pase de Gvardiol, pero el conjunto local respondió tres minutos después con un potente disparo desde fuera del área de Jordan Teze que sorprendió a Donnarumma. El City insistió, aunque con problemas para generar ocasiones claras, y volvió a adelantarse justo antes del descanso gracias a un cabezazo del delantero noruego, que ya suma nueve partidos consecutivos viendo puerta.
Cuando todo parecía encaminado a una victoria visitante, el VAR intervino en la última acción del encuentro y el colegiado concedió un penalti que transformó el Mónaco para mantener viva su esperanza en la competición.
El Luis II sigue siendo un bastión europeo: los del Principado solo han perdido uno de sus últimos 14 duelos continentales en casa, un dato que contrasta con la irregularidad que muestran esta temporada en el resto de escenarios.