
A primera vista, parece que el “Rey” ha mostrado lealtad. LeBron James, ícono de la NBA y apodado “el Rey”, ha decidido permanecer en Los Angeles Lakers, haciendo uso de su “opción de jugador”, una cláusula que le permite elegir si continúa o no con el equipo.
En su temporada número 23 en la liga, James cobrará 52,6 millones de dólares, una cifra establecida en el contrato que decidió no rescindir ni renegociar. A sus 40 años, el jugador que popularizó esta herramienta contractual ha optado por seguir en los Lakers, lo que podría indicar que no tiene ofertas más atractivas en el horizonte. Esta podría ser también su última campaña en la NBA.
Su agente, Rich Paul, explicó que James “quiere competir por un campeonato”. No obstante, reconoció que la franquicia angelina está mirando hacia el futuro. Ese futuro tiene nombre: Luka Doncic. El joven esloveno de 26 años llegó a los Lakers desde los Dallas Mavericks durante la temporada pasada.
Aunque existía la posibilidad de extender el vínculo de LeBron más allá de 2025, no hubo negociaciones en ese sentido. Además, su representante dejó claro que James no está dispuesto a aceptar una reducción salarial, lo cual limita las opciones del equipo para reforzar el plantel sin sobrepasar el tope salarial actual, fijado en unos 154 millones de dólares.