El tenista italiano Jannik Sinner expresó su dolor tras la derrota en la final de Roland Garros frente al español Carlos Alcaraz, en un partido que se convirtió en el más largo en la historia del torneo con una duración de 5 horas y 29 minutos.

“Es difícil de aceptar ahora, porque tuve esas oportunidades”, reconoció Sinner en la conferencia de prensa posterior, refiriéndose a las tres bolas de partido que no pudo concretar en el cuarto set. “Duele, pero no puedes irte llorando. Estas cosas pasan”, añadió visiblemente afectado.

A pesar de la decepción, el número uno del mundo destacó sentirse satisfecho por el nivel que mostró durante todo el torneo, al llegar a la final sin haber perdido ningún set. “Estoy feliz por cómo hemos trabajado para llegar a este momento”, enfatizó.

Sinner calificó el duelo como “muy igualado”, pero admitió que le costaba superar la frustración por las oportunidades desperdiciadas. Al ser consultado sobre cómo afrontó el cuarto set tras no cerrar el partido, explicó: “Intenté borrar todo y empezar de cero”.

El italiano valoró el ambiente histórico y la participación del público durante la final, aunque reconoció que habría estado “más feliz” si hubiera ganado. Sobre sus próximos pasos, señaló que buscará el apoyo de su círculo cercano y su familia, aunque lamentó que su padre no pudo acompañarlo porque estaba trabajando.