
Los Juegos Olímpicos de París serán pioneros en la integración visible de la Inteligencia Artificial (IA) para participantes y espectadores, aunque el verdadero avance se espera para Los Ángeles 2028, donde la organización dependerá en gran medida de datos procesados por modelos matemáticos.
La IA beneficiará múltiples áreas: transporte, tecnología, diseño de estadios, selección de personal, ahorro energético, generación automática de resúmenes de imágenes y arbitraje. El objetivo es crear unos Juegos “más eficientes”, según el director de Tecnologías de la Información del Comité Olímpico Internacional (COI), Ilario Corna. “El deporte no es inmune a la aceleración del uso de la IA y a los cambios que va a traer”, señaló Corna en una entrevista con EFE.
El COI formó en 2023 un grupo de trabajo que desarrolló la Agenda Olímpica IA, con cinco objetivos clave: apoyo a los deportistas, competencia limpia y segura, igualdad de acceso a los beneficios de la IA, sostenibilidad, implicación del público y eficacia en la gestión del COI.
La IA tiene el potencial de transformar la vida de los deportistas, desde la prevención de lesiones hasta la protección contra el acoso en redes, pasando por entrenamientos personalizados y mejoras en los arbitrajes.
“La ciencia de la computación ha existido desde la década de 1950. Alan Turing ya escribió entonces sobre el primer concepto de IA”, recordó Corna. “En 2020 comenzamos a recopilar datos operativos que nos ayudarán a organizar mejor los Juegos Olímpicos en el futuro”, explicó el experto del COI.
En París, la IA se usará para crear resúmenes automáticos de vídeo para usuarios en línea. Durante los Juegos se producirán más de 11,000 horas de imágenes, equivalente a 1,2 años de contenido. Gracias a la IA, las imágenes se personalizarán y crearán distintos clips según las preferencias de cada usuario.