En la primera audiencia del juicio político contra la magistrada Julieta Makintach, ésta reconoció ante el Jurado de Enjuiciamiento que su actuación provocó un “daño tremendo” a la Justicia argentina. La controversia surgió tras la anulación del juicio por la muerte del exfutbolista Diego Armando Maradona el pasado 29 de mayo, debido a que Makintach permitió y protagonizó un documental sobre el caso mientras actuaba como vocal en el tribunal.
“Nunca me imaginé que iba a generar tanto daño a la Justicia. Era todo lo contrario a lo que yo buscaba”, expresó la magistrada en una declaración espontánea ante el Jurado de la Legislatura de Buenos Aires, que podría decidir su destitución definitiva. “Fue una piedra con la que me tropecé sin dimensionar las consecuencias. Entiendo que el daño que ocasioné es tremendo”, añadió.
Durante el inicio de la audiencia, la fiscal a cargo de la acusación pública, Analía Duarte, responsabilizó a Makintach por “incompetencia y negligencias demostradas en sus funciones, incumplimiento de los deberes inherentes a su cargo, parcialidad manifiesta, revelación de secretos, malversación de caudales públicos y abuso de autoridad”.
Makintach, integrante del Tribunal Oral Criminal número 2 de San Isidro, provincia de Buenos Aires, se encuentra apartada preventiva e indefinidamente de su cargo desde julio y enfrenta la posibilidad de ser destituida.
El juicio político se originó tras la denuncia presentada por el procurador general Julio Conte Grand ante la Secretaría Permanente de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios Judiciales de la provincia de Buenos Aires.