Después de una temporada que superó todas las expectativas, el Girona ya experimenta las dificultades de este nuevo curso, ocupando la 12ª posición en la Liga y tras un doloroso debut en la Champions League, donde cayó 1-0 en París en el minuto 90. El equipo catalán se estrenará como local este miércoles (16:45 GMT) ante el Feyenoord, con la necesidad de conseguir una victoria que devuelva la alegría.

Dicen que lo difícil no es llegar, sino mantenerse, y el Girona lo está viviendo en carne propia. Con un calendario mucho más exigente esta temporada debido a su participación en la Champions por primera vez, el equipo también ha perdido a varias figuras clave como Savinho, Artem Dovbyk y Aleix García, quienes han sido fichados por clubes importantes como el Manchester City, la Roma y el Bayer Leverkusen, respectivamente.

El famoso himno de la Champions resonará por primera vez en Montilivi, el modesto estadio del Girona con capacidad para 14.600 espectadores, que hasta hace poco estaba más acostumbrado a albergar partidos de las categorías inferiores del fútbol español.