Redacción NVS / Agencias
La Fiscalía de Brasil acusó a 16 personas, entre ellas siete futbolistas profesionales, por su presunta participación en una red de amaño de partidos. El hecho se presenta como uno de los mayores escándalos desde que se legalizaron las apuestas deportivas en el país sudamericano en el 2018.
Los presuntos delitos sucdedieron en 13 partidos de fútbol, incluidos ocho de la liga brasileña el año pasado. Jugadores de clubes como Santos, Juventude y Cuiabá estaban entre los acusados, indicaron los fiscales del estado de Goias.
Los fiscales explicaron que la banda criminal pagaba a los jugadores para que realizaran infracciones, para luego apostar a esos resultados y ganar cuando se pitaban las faltas, señalan los documentos de la acusación.
El grupo ofrecía hasta $100,000 como pago inicial a los jugadores, añadieron los fiscales.
