El español Marc Márquez (Ducati Desmosedici GP25), actual líder del Mundial 2025 de MotoGP, llega como gran favorito al Gran Premio de la República Checa, que regresa este fin de semana al calendario tras cuatro años de ausencia. El circuito de Brno, donde se corre en sentido horario, no ha sido históricamente su tipo preferido, pero eso no ha impedido que el ocho veces campeón del mundo haya brillado allí.

Antes de que el trazado checo desapareciera del campeonato en 2020, Márquez sumó tres victorias (2013, 2017 y 2019), un segundo puesto (2015) y dos terceros (2016 y 2018), convirtiéndolo en uno de los pilotos con mejor palmarés reciente en este circuito.

En su primera temporada como piloto oficial de Ducati, el piloto de Cervera ha demostrado que ya no existen circuitos “favoritos” o “desfavorables”. Su enfoque agresivo y su capacidad para adaptarse le han permitido ganar 10 de las 11 carreras sprint y 7 grandes premios, consolidándose como la referencia absoluta del campeonato.

El regreso a Brno presenta un desafío igual para todos. Tras su reasfaltado completo, los pilotos no contarán con referencias previas, lo que obligará a trabajar a fondo desde los entrenamientos. Pese a ello, Márquez parte con una ventaja considerable en la clasificación: 83 puntos de diferencia sobre su hermano Álex Márquez (Ducati GP24), quien, pese a una lesión en la mano izquierda, logró ser segundo en Alemania tras las caídas de Fabio Di Giannantonio y Marco Bezzecchi.

Álex conoce mejor que nadie a Marc, con quien comparte entrenamientos y vida diaria, y reconoce que su hermano mayor ya no depende de circuitos a medida. Con la Ducati GP25, una moto casi perfecta, ha conseguido rendir al máximo en todos los trazados, algo que no ha podido replicar su compañero de equipo, Francesco ‘Pecco’ Bagnaia, lastrado por problemas con el tren delantero y falta de confianza.

Bagnaia, tercero en el campeonato, solo ha logrado una victoria (en Austin), y aunque ese circuito era considerado uno de los “jardines” de Márquez, este no logró el triunfo, confirmando que ya no hay terrenos seguros en MotoGP.

A este trío se podría sumar otro protagonista destacado: Jorge Martín, vigente campeón del mundo, quien planea reaparecer en Brno con la Aprilia RS-GP. Tras probarse en Montmeló y en Misano, Martín esperará el visto bueno médico en la revisión del jueves para confirmar su regreso a la competición.