Palmeiras y Oporto no pasaron del empate (0-0) este domingo en un entretenido duelo por el Grupo A del Mundial de Clubes, en el que ambos equipos mostraron sus armas ofensivas pero carecieron de precisión frente al arco. El encuentro marcó el debut de Gabri Veiga con los Dragones tras su regreso al fútbol europeo, casi dos años después de fichar por el Al-Ahli saudí.

El mediocampista español disputó 67 minutos, dejando algunas conexiones interesantes con Rodrigo Mora y generando llegadas desde tres cuartos de cancha, aunque su aporte en defensa fue discreto.

Por primera vez en su historia, estos dos clubes se enfrentaban oficialmente. El estadio vibró con mayoría brasileña en las gradas, alentando a un Palmeiras que apretó con más insistencia en la segunda mitad. La joya brasileña Estêvão, conocido como ‘Messinho’, fue el más activo en ataque para el Verdão, pero no logró definir con claridad en las múltiples ocasiones que generó antes de ser sustituido en el minuto 65.

En el tramo final del partido, los de Ferreira rozaron la victoria con dos oportunidades claras: un remate del argentino José Manuel “El Flaco” López y un cabezazo de Murilo que se estrelló en el poste. Cláudio Ramos fue clave para que el Oporto mantuviera el arco en cero, destacando con una triple intervención en el tiempo añadido de la primera parte, ayudado por Francisco Moura.

Durante los primeros 45 minutos, la posesión y las oportunidades se repartieron equitativamente. Sin embargo, Palmeiras terminó la primera mitad con más convicción ofensiva. Oporto, por su parte, sufrió en la salida de balón, especialmente tras un error temprano de Varela que casi aprovecha Estêvão para abrir el marcador.

El técnico Anselmi apostó por envíos largos buscando las descargas y velocidad de Samu Aghehowa, una fórmula que generó ciertas inquietudes en la zaga rival, pero que tampoco logró quebrar el empate.