El delantero nigeriano del Nottingham Forest, Taiwo Awoniyi, permanece en coma inducido en un hospital de Inglaterra tras ser sometido a la primera parte de una compleja cirugía abdominal. La intervención médica continuará este miércoles, según informaron medios británicos.

La lesión ocurrió el pasado fin de semana, durante el partido ante Leicester City por la Premier League, cuando Awoniyi chocó contra un poste en su intento por convertir un gol. De acuerdo con la BBC, el impacto provocó la rotura del intestino. Por su parte, The Guardian señaló que “nada hace pensar que su vida corra peligro”, mientras que Daily Maildestacó que la lesión “pudo haber sido fatal”.

El club confirmó el martes que el jugador fue operado tras conocerse la gravedad del diagnóstico, el cual motivó su traslado urgente al hospital. Según los primeros reportes médicos citados por Daily Mail, la primera fase de la cirugía fue exitosa, aunque se trata de un procedimiento complejo. El coma inducido, explican, busca minimizar el movimiento del jugador y estabilizar sus constantes vitales.

El accidente ocurrió a dos minutos del final del encuentro, que terminó empatado 2-2. Awoniyi intentó rematar un centro de Anthony Elanga, quien se encontraba en posición adelantada. Por la regla del delay en el levantamiento de la bandera, los asistentes no marcaron el fuera de juego hasta que finalizó la jugada, la cual fue posteriormente revisada por el VAR.

Nottingham Forest, actualmente séptimo en la tabla de la Premier League, emitió un comunicado el lunes en el que aseguró que el jugador “se está recuperando bien”.

El episodio también generó tensión interna en el club. El dueño del equipo, el griego Evangelos Marinakis, ingresó al campo tras el pitazo final y discutió con el entrenador Nuno Espírito Santo. La molestia se debió a que el cuerpo médico permitió que Awoniyi regresara al terreno de juego sin reconocer la gravedad de su estado, lo que dejó al equipo prácticamente con diez jugadores en un tramo decisivo del encuentro. El delantero mostraba claros signos de dolor y dificultad para moverse, y fue sustituido en los minutos finales.