AFP
El astro argentino Leo Messi inauguró este martes su quinto Mundial de manera agridulce con la derrota 2-1 contra Arabia Saudita en el estadio de Lusail, en el primer encuentro de la Albiceleste en Catar-2022.
El capitán de Argentina abrió el marcador al transformar un penal realizado sobre Leandro Paredes (10), sólo unos pocos minutos después de poner en aprietos al meta Mohamed Allowais con un disparo raso (2).
Messi anotaba de esta manera su séptimo gol en un Mundial, todos marcados en las fases de grupos de los torneos mundialistas, aunque todavía está lejos del récord de 16 tantos en Mundiales que detenta Miroslav Klose con 16 anotaciones.
El capitán argentino se resarció de paso del penal que falló en el debut ante Islandia (1-1) en el último Mundial de Rusia-2018.
Perdidos en el desierto
Precisamente una pérdida de balón de Messi acabó con el primer gol de Saled Alshehri (48).
El capitán pudo poner el empate en una llegada rápida al área, pero Hassan AL-Tambarktun le rebañó la pelota cuando se disponía a disparar (55).
Al contrario que en muchas otras ocasiones, Messi no pudo rescatar a su equipo, que no había perdido el primer partido de un Mundial desde Italia-1990, aunque rozó el empate.
Casi al final del encuentro, Messi logró conectar un cabezazo en boca de gol que detuvo el portero saudí para desesperación del capitán argentino (84).
El inicio es agridulce para Messi que sueña con alcanzar en Catar, el único gran trofeo que falta en sus vitrinas tras lograr ganar con Argentina la Copa América en 2021.
“Seguramente es mi último Mundial, mi última oportunidad de conseguir ese gran sueño que todos tenemos, pero no hice nada especial”, afirmó Messi el lunes en la multitudinaria rueda de prensa anterior al encuentro.
El deseo del jugador ha sufrido un duro golpe este martes con la sorpresiva derrota ante los saudíes, que obligará a Messi y sus compañeros a poner una marcha más en el próximo encuentro contra México dentro del grupo C, en el que también está la Polonia de Robert Lewandowski.
