junio 13, 2022
Agencias
El comisionado del circuito estadounidense de la PGA, Jay Monahan, defendió la exclusión de los golfistas que se unan a la nueva serie LIV Golf, respaldada por Arabia Saudita, asegurando que no permitirá que se aprovechen de los jugadores que han sido “leales”.
Monahan ofreció el domingo sus primeros comentarios públicos desde que su circuito anunció la suspensión de 17 jugadores por su participación esta semana en el evento inaugural de LIV Golf, incluidas figuras como los estadounidenses Phil Mickelson y Dustin Johnson y el español Sergio García.
“Mi trabajo es proteger, defender y celebrar a nuestros leales miembros del circuito PGA, a nuestros socios y a nuestros aficionados, y eso es exactamente lo que hice”, dijo Monahan entrevistado en el marco del Abierto de Canadá, que concluía el domingo en Toronto.
Los golfistas que han optado por unirse a la serie respaldada por Arabia Saudita, que ofrece las mayores bolsas de premios de la historia de este deporte, no tienen actualmente ninguna vía de regreso a los eventos de la PGA.
“Ya no son elegibles para jugar torneos. Y en este momento eso es todo lo que estamos dispuestos a hablar”, recalcó Monahan. “Veremos cómo siguen desarrollándose las cosas”.
“¿Por qué nos necesitan tanto?”, preguntó el comisionado. “Esos jugadores han elegido firmar contratos lucrativos de varios años para participar en una serie de juegos de exhibición contra los mismos jugadores, una y otra vez”.
“Los mejores jugadores del mundo están aquí, con millones de aficionados mirando (…) Por eso nos necesitan”, dijo Monahan sobre el torneo en Toronto, donde el ex número uno mundial Rory McIlroy trataba de revalidar el título frente al estadounidense Justin Thomas, reciente ganador del Campeonato de la PGA.
“No vamos a permitir que jugadores se aprovechen de nuestros fieles miembros, los mejores jugadores del mundo”, afirmó.
Monahan también expresó su apoyo a una organización de familiares de víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001 que criticó a los jugadores que aceptaron las ofertas del circuito saudita.
La organización pidió a los golfistas estadounidenses que reconsideren su decisión, alegando que desde ese país se brindó apoyo financiero y logístico para los atentados.
“Le preguntaría a cualquier jugador que se haya marchado, o considere marcharse: “¿Has tenido que pedir perdón alguna vez por ser miembro de PGA”, afirmó Monahan.